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martes, 3 de marzo de 2009

Patadas de escarabajo

"Look into my eyes, my eyes, into my eyes..."


Aquí somos tan cinéfilos que mi señor padre se compra el ABC los domingos para hacerse con la peli que regalan ese día. Es en el dominical de ese periódico, en el estupendo El Semanal, donde he leído esta frase de Juan Manuel de Prada:




"Solo la fe sobrevive a las plagas y es capaz de salvar el mundo; lo demás son pataleos frenéticos de un escarabajo panza arriba".




El artículo se titula "Lo único que queda". Queda claro dentro del mismo que, para el escritor vasco, el mundo actual se parece bastante a la vieja y entrañable Babilonia donde el hombre (y la mujer) estaban entregados al culto politeísta y a la francachela diaria. Fueron arrasados, claro, por ese Dios tan teatrero del Antiguo Testamento, tan dado a las zarzas ardiendo, la destrucción de ciudades, el asesinato masivo y ese tipo de cosas. Un Dios que aplastaba inmisericordemente a los que, reacios a creer sólo en él y no en los otros Dioses, pataleaban frenéticamente como escarabajos panza arriba.




Para De Prada no hay duda: la crisis que atravesamos es una especie de plaga bíblica. Una plaga bíblica que castiga inmisericorde a esta Babilonia globalizada que es nuestro mundo. En el fondo tiene razón: La crisis afecta menos a los ciudadanos que tienen fe (católica)...lo que no explica por qué este Dios tan sabio le dio a los jeques árabes océanos completos de petróleo y, a nosotros, nos haya quitado a Pepe Rubianes que era uno de los tíos más graciosos del planeta Tierra y también uno de los que desplegaba una mala baba más evidente y necesaria. Quizás aquellos textos sobre la existencia de Dios que vi hace algunos años en Barcelona no le sentaron bien.




Cuando lo único que queda en la fe puedes hacer lo que hace el PP: aferrarte al triunfo en las autonómicas gallegas y celebrar por todo lo alto haber perdido dos escaños en las elecciones euskaldunes. Hoy Cospedal decía que era una especie de "triunfo extraordinario"...a mi esto me recuerda al chiste del elefante que va al cine y se sienta delante de una hormiga. La hormiga muy enfadada se coloca delante del elefante, se gira y le dice: "¿A que jode, eh? ¿A que jode?". Patadas de escarabajo. El PP puede estar contento de haber presentado a un tipo tan poco atractivo como Basagoiti (una especie de versión estilizada de Agag) y no haberse hundido irremisiblemente. Eso si que es sorprendente.




También puedes hacer lo que hace ZP y hacer con que no pasa nada. Hoy se ha reunido con Medvedev...un ruso que manda menos que Putin y que viene con un gasoducto debajo del brazo. Le ha puesto una buena cara estupenda y hemos llenado Madrid de banderas tricolores. Sólo nos ha faltado un coro rociero cantando eso de "Rusos blancos/os recibimos con alegría/olé tus zares/olé tu Estepa/olé tus tías"...o algo así. Lo de la democratización y bla, bla, bla ya lo hablaremos en otro momento. Ya sabemos todos que defender a los disidentes de un régimen armado hasta los dientes es como pasarse el día en el campo volteando escarabajos dados la vuelta.




Menos mal que como Dios (el De Prada) aprieta pero no ahoga, Eastwood ha estrenado "Gran Torino" -que es un peliculón- y que para mi eso es una señal de que no hay plaga bíblica que 100 años dure por más que De Prada o Benedicto se empeñen.

sábado, 3 de enero de 2009

Los superjuguetes duran todas las navidades


No soy de navidades, desde chiquillo. Ahora menos porque en el pueblo no tengo internet y me tengo que dar al entretenimiento analógico: leer "El Arco Iris de gravedad" de Thomas Pynchon (un Himalaya literario de 1200 páginas de lo más recomendable), ver pelis y "españolear" mucho.


Se que estamos en navidades porque en la tele ponen muchas pelis infantiles y puedo ver por enésima vez esa cosa loquísima llamada "Los fantasmas atacan al jefe". Una requeteversión del cuento de Navidad de Dickens dirigida por Richar Donner (me temo que puesto de muchos estupefacientes de alta calidad) y protagonizada por ese genio incomprendido llamado Bill Murray. Bill Murray es uno de esos actores que siempre quiso ser un tipo serio. Después de el éxito de los Cazafantasmas se negó a rodar una secuela y se largó a París para estudiar francés prometiendo que sólo comprometería su nombre en películas de alta calidad. Rodó una adaptación de "El filo de la navaja" de Somerset Maughan y se arruinó teniendo que volver a la comedia, cosa que, al parecer, le resulta harto dolorosa. Wes Anderson y Sofia Coppola lo recuperaron para una comedia más inteligente (más rarita, más moderna, más estilizada, más guay...) e, incluso, Tim Burton le dio en Ed Wood uno de esos papeles que vienen ni al pelo para un actor que quiere convertirse en el nuevo Buster Keaton a costa de poner cara seria en cada plano mientras que a su alrededor se desencadena la debacle.


Bill suele renunciar a hablar de sus películas comerciales y tampoco suele ser muy dado a comentar muchos aspectos de su paso por Saturday Night Live donde el elenco original (Chase, Aykroyd, Radner, Belushi, Martin, Kaufman...) le dio bastante mala vida. SNL es otro de esos programas que he podido disfrutar estas navidades encontrándome con la paradoja de pensar que, joder, esta nueva generación de cómicos americanos es bastante inferior a la de temporadas anteriores...una pena, pero es lo que ocurre cuando tienes algo idealizado.


En España tenemos un caso parecido con dos actores de comedia que también se aparecen por estas fechas: Josema Yuste y José Mota.


Ambos siempre se han querido reivindicar como actores serios echándole la culpa al vulgo de su permanencia en sus respectivos dúos cómicos (Martes y 13 & Cruz y Raya) que, en realidad, parecen haberles hecho disfrutar muy poco. Por desgracia, el camino hacia el drama -el que ha hecho Resines, por ejemplo- es difícil en un país donde tendemos a querer siempre mucho más de lo mismo lo que explicaría el por qué los buffets libres de nuestros hoteles presentan esas montañas de patatas fritas precongeladas que son la envidia del mundo civilizado y esclerotizado.


Josema se ha vuelto a la pareja cómica junto a Flo y Mota ha iniciado una carrera en solitario con un humor amable y conservador al que no le faltan los números musicales de musicales de Broadway del pelo de Hair, Cabaret etc. que me imagino que dejarán a nuestros abuelitos con el culo completamente torcido.


La pareja cómica es la gran incógnita de nuestro show bussiness: ¿Por qué cazan nuestros cómicos en pareja? ¿Por qué se rompen en la cima esparciendo un tufillo a mal rollo insoportable? ¿Será que soportamos mal el éxito propio pero mucho peor el éxito ajeno? Haced cuentas, insustanciales, y os daréis cuenta de que el mal rollismo más acojonante se encuentra en las historias de nuestros duets cómicos desde tiempos inmemoriales y que abarca a Lusson y Codeso; Santos y Zori, Juanito Navarro y Doña Cocreta; Esteso y Pajares, Manolo Cal y Eloy Arenas y un largo etcétera que te lleva hasta las puertas mismas del infierno.


Los superjuguetes cómicos son para las navidades, etapa donde los aullidos de alegría y las puñaladas se dan la mano amablemente y donde en cada casa se vive una especie de tragicomedia que va del 24 o el 25 (sea Castilla, sea Cataluña) y se repite en su segundo acto del día 31 donde como el cava y la sidra corren con más alegría pues se espera que llegue el perdón de todos los pecados del año.


No había más que ver el resumen que hizo Está pasando de sus momentos estelares (Paqui Peña destruyendo cosas adrede por toda España para mendigar un zapping, gente abofeteando reporteros, personitas humanas corriendo delante de una cámara de TV, gestos largos, malas caras) para saber que hay cosas que no cambian.


Sin duda, la alegría del año me la ha dado José María Carrascal con este artículo publicado el día 29 en el diario ABC donde confundía a Harry el Sucio con Larry el Sucio. En serio, no era una simpática inocentada del periodista español, no, es que simplemente le falta mazo el riego o algo. Ahí está José María sonriente escribiendo su columnita a una pastufla de vellón por palabra incurriendo en uno de esos errores que también te aseguran que las cosas no cambian. Enhorabuena a ABC (que es el periódico que compra uno de mis abuelos y que devoro en estas fechas) por mantener a semejante momia entre sus firmas.


Como nada podía ser malo del todo en medio de la vorágine del cotillón de Nochevieja (en que me vestí, como mandan los cánones, de comisario de la Brigada Social con una corbata estrecha estilo Kennedy del abuelo) acuñé un nuevo término al ir a saludar a una personita: "Gente patata frita". Así me asaltan a mi los grandes pensamientos filosóficos, en medio del bullicio...y con un Johnny Walker aguado en la mano, claro. Me explico:


Te compras una bolsa de patatas fritas de esas de churrería, que vienen en una bolsa de papel que se va haciendo transparente al ritmo que se pringa de aceite. Llegas a tu casa, te las pones en un bol, te pones a ver la tele tranquilamente, sacas una sin mirar te la metes en la boca y...¡Asco! has cogido la típica papa frita a la que se le ha hecho una especie de verruga rellena de aceitazo y, cuando la muerdes la boca se te llena de ese líquido viscosillo y a duras penas llegas al water para escupirla. Coges el bol de patatas fritas y lo tiras por miedo a que una de esas cabronas esté allí agazapada. Pues hay gente que es así. Parecen patatas fritas normales, agradables y, sin embargo, le crecen las verrugas repletas de aceite por dentro y te dan como cosica.


Quizás Carrascal y la "gente patata frita" hayan sido de las mayores revelaciones de todo este tiempo vacacional excesivamente largo donde, como no, también he visto a las viejas amistades que me han alegrado estas dichosas fechas.


Pronto vuelvo a Madrid, a mi conexión de internet 24 horas, a mis cosas, al día a día...menos mal, el exilio me sienta entre fatal y medio bien. ¡Que voy a contaros! ¡Feliz año nuevo, personas!


Nota del Insustancial: El título de la entrada está fusilado del muy recomendable "Los superjuguetes duran todo el verano", cuento de Brian Aldiss que inspiró a Spielberg y a Kubrick la película "Inteligencia artificial".