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miércoles, 6 de mayo de 2009

Un estilo musical que se jode

Por suerte o por desgracia me encuentro con este videoclip de Tito MC...


Es un rapero sevillano (me imagino que de primera generación) que hace buenos todos los topicazos que de este al otro confín se han difundido sobre el rap y el hip-hop en nuestro país donde, por desgracia, se ha unido a la estética "chunda-chunda" del coche tuneado y el rollo poligonero más criminal.

Pregúntale a cualquiera de estos zascandiles quienes son 2Live Crew, Public Enemy, Bodycount, LL Cool J, Sugar Hill Gang, UTFO, Ice Cube o de actualidades como Mos Def, Dead Prez, Talib Kweli, Doctor Dre y algún largo etcétera que incluiría a blanquitos como Beasty Boys y ya verás lo que te contestan. Es más mi pregunta es: ¿Podrían contestarte? Me temo que no.



Es normal que el Rap haya perdido su esencia desde su tímida aparición a mediados de los 70; una expresión en forma de música, grafitti y baile representada por pobretones marginados de una generación criada por ex activistas negros de todo pelaje (Tupac Shakur era hijo de un miembro de los Black Panthers, la mamá de Mos Def era una de las caras visibles de la Iglesia del Islam en los tiempos de Malcom X, por ejemplo) ha podido ser rápidamente absorbida de mejor o peor manera por un sistema de producción musical esclavista enraizado por los primeros sellos musicales que comenzaron a vender única y exclusivamente música negra en lo años 50/60 cuyo mejor exponente es Suge Knigth, capo del potentísimo sello Death Row Records, cuya leyenda negra de haber colgado personalmente a Vainilla Ice por los tobillos desde la azotea de un hotel para "negociar" los derechos de su carrera musical lo acompañará para siempre. Pero también por marcas comerciales de todo pelaje que vieron en su estética y en su ética una forma estupenda de vender productos.


A grandes rasgos el hip-hop politizado, o más o menos con mensaje, ha dado paso a fantoches como Sean Diddy Combs (antes conocido como "Puff Daddy", encantado con liarse a tiros para montar un pequeño circo publicitario a la menor ocasión) o 50 Cent, más conocido por haber recibido disparos en la calle (una marca batida por James Blunt que sirvió como soldado en el ejército británico y sirvió en Los Balcanes) y tener un videojuego lamentable y una carrera como actor sonrojante.

El traslado de un mensaje que comenzó declarando su rabia contra el sistema ("Fight the power", Public Enemy, un himno) quedó, casi por completo, reducido a un canto al orgullo de haber nacido pobre y haber alcanzado el status suficiente de poder viajar en un Bentley mientras se disfrutaba de una botella de Cognac francés de 600 dólares la botella. Es en ese punto en el que el hip hop llega con más fuerza a nuestro país donde las letras han sido mal traducidas a una clase media bastante alejada de los páramos criminales de Bedford-Stuyvesant (barrio de referencia para la comunidad negra por ser donde han nacido algunos de los talentos del humor y de la música de los últimos años como Chris Rock o Dave Chapelle) y que reciben este mensaje marcado por el machismo, la violencia y el culto al Bling-bling (esas cosas doradas que a Mr. T le daban tanto punto) sin capacidad para digerirlo en su conjunto.

Siempre que veo a un rapero español me pregunto: ¿Cuanto duraría suelto por Harlem? Me temo que poco. Lo malo abunda y si quitamos de la lista a gente como "Violadores del Verso", "La Excepción ke confirma la Regla", "Mala Rodríguez", "Def Con Dos", "Xhelazz"... que si han entendido la capacidad del hip-hop para ser un vehículo de mensajes a contracorriente y no una sombra blanquecina de los hermanos de la East y la West Coast nos quedan tipos como Tito MC que gusta de ser una caricatura que lleva pistola de perdigones y se llama así mismo "negrata" mientras canturrea en un lavadero de coches. No es que falte pasta, es que faltan neuronas...

¿Tiene algo que ver esa música asquerosa que habla básicamente de "ser malote" y de "no me mires mal por ser como soy con esta demostración de fuerza?

¿Cómo puede decir alguien que vive en Sevilla, Barcelona o Madrid que ha recibido una educación más o menos normal, que tiene unos padres currantes, que come caliente en su casa,que se baja con los coleguitas al parque a echarse su medio porro y su tercio de birra cosas tan feas como "quiero follarme a algunas zorras" o "La policía me jode el rollo" cuando en su vida han sabido lo que significa la palabra "follar" y la policía, evidentemente, no los ha molestado nunca y creer que están haciendo canciones? ¿Alguien puede explicarle a alguno de estos muchachos algo de historia musical? ¿Algo al menos? ¿Alguien se imagina que ahora a los de Dakota del Norte les de por cantar flamenco y por decir que son toreros? Pues eso.

martes, 4 de noviembre de 2008

Si Hunter estuviera aquí...



En el vagón viajaban dos gemelos. Parecían dos suricatos asomando la nariz por la entrada de la madriguera, movían la cabeza a la vez y hacían gestos similares para acomodarse en el asiento.
Iban hablando con un tercero desparejado que decía que no se creía que fueran a poner un negro como presidente…vaya…no es que el muchacho pareciera racista simplemente parecía sorprendido por la capacidad de las razas inferiores para escalar puestos en la administración pública de Estados Unidos. No es el único.


Los mensajes de estas elecciones americanas han sido sutilmente racista: joven, poco preparado, sin futuro internacional, poco voluntarioso, débil, derrochador, rencoroso…es curioso que el partido republicano identificara en todo un candidato a la Casa Blanca las mismas carencias que, normalmente, suelen utilizar para desprestigiar a la comunidad negra clase media baja urbana: joven, analfabeto, sin puesto de trabajo, sin voluntad, débil, derrochador, rencoroso….


En realidad le estaban diciendo a la gente que Barack Obama no era mejor que el chico que sirve las raciones de pollo en el KFC o un limpia coches. Da igual que Barack sea el ideal del American Way of Life en persona: Persona de baja escala económica, de ascendencia inmigrante en primera generación que, estudiando y trabajando, consigue terminar una carrera, destacar en su vida profesional y, a su vez, fundar una familia junto a otra emergente letrada que, al igual que él, ha tenido que remar el doble de fuerte que los demás para llegar a puerto ¿Por qué es igual que los demás? Porque es NEGRO, negro como Malcom X, como Flavor Fav, como Los Panteras negras, como los participantes en los disturbios contra la sentencia del caso Rodney King, como OJ y como todos los negros malos, armados y pobres que protagonizan las páginas de sucesos. Es un negro de acojonar, de dar miedo, que bebe birra en la calle y llama a su mujer "zorra".
Ni siquiera él parece haberse dado cuenta a tenor de lo poco que se ha referido, ni siquiera jocosamente, al color de su piel.


Preventivamente, la FOX, ya se ha encargado de hablar de “el candidato de color” o de utilizar con un doble sentido evidente ese apodo de “Black Magic” (que igual suena muy positivo o nos recuerda lo del hechicero, el yuyu y a la rama africana de la familia). Ya digo, el asunto de la raza ha sido utilizado de manera preventiva contra Obama que ha tenido que soportar que a su señora la llamara “negra rencorosa y profesional” incluso un tío que se entera poco de lo que ocurre fuera de su círculo de amistades como Fede J. Losantos ¿Qué es ser un negro rencoroso y profesional? Nadie lo sabe, pero suena fatal, yo pensé que uno es negro porque genética y no por oficio. Digo de forma preventiva porque se ha evitado que, como último cartucho, Barack pudiera haber utilizado el asunto del racismo como un arma arrojadiza, haber expuesto las vergüenzas de un país que, todavía, no ve con buenos ojos a los negros y, sobre todo, donde se permite que los grupos de ultraderecha amenacen al candidato negro diciendo que “si quiere vivir muchos años yo que él doblaría la seguridad y no dormiría dos días en la misma cama” como dijo el Gran Dragón del Ku-Klux Klan hace poco.


El caso es que, frente a él, se erige la figura de McCain retratado como héroe de guerra, temeroso de Dios, sencillo, un abuelito de puño de hierro…


Está claro que Hunter S. Thompson hubiera sido un buen reportero para contraatacar. El eterno director de asuntos nacionales de la revista Rolling Stone desaparecido en 2005 por propia voluntad podría haber puesto los puntos sobre las íes. En realidad no hay mejor arma contra la paranoia generalizada que se apoderado de estas elecciones americanas (que a estas alturas son universales pese a que, en realidad, es evidente la pérdida de pujanza de la administración USA desde la pérdida de brújula del 11-S) que un paranóico crónico con ojo psicodélico para captar el verdadero espíritu de la metrópoli.


No hay más que echarle un vistazo a su artículo “Freak Power on the rockies” su primer trabajo para Rolling Stone en 1970 para darse cuenta. Por aquella época Thompson había fundado un partido chiflado llamado Freak Power y se había erigido en su Presidente ¿El objetivo? Presentarse a las elecciones para Sheriff del condado de Pitkin, Colorado. Sus obejtivos, muy claros, vencer a su oponente un fascista redomado que lo llamaba “mi melenudo oponente”, “drogadicto e irresponsable candidato”, “hippie comunista” y que utilizaba como arma la típca batería de ideas chifladas que suele acompañar a un candidato conservador en Norteamérica: exenciones fiscales para los ricos, venta del suelo público, limitaciones a la estancia por raza…etc.
Hunter decidió combatir la locura con la locura y juró que iba a legalizar las drogas y penalizar el tráfico, legalizar la prostitución y perseguir el proxenetismo, convertir todos los caminos asfaltados en sendas de hierba para que la gente pudiera pasear, cambiarle el nombre a Aspen por “Ciudad culo gordo” y otras lindezas.


Estuvo a punto de ganar. Que hubiera sido seguramente un irresponsabilidad pero, lo mejor, es que, al menos, preventivamente, su oponente tuvo que rebajar bastante el nivel de sus promesas/amenazas.
Es imposible también pasar por alto el artículo “Fear and loathing in the 72´Presidential rally” publicado también en Rolling Stones o el artículo inauguracional del periodismo gonzo “The Kentucky´ Derby is decadent and depraved” que sirvieron para que Thompson ajustara cuentas con la América colocada de conservadurismo, puesta hasta las cejas de fe ciega en el capitalismo.
De hecho me temo que Thompson hubiera sido el único tipo a la altura de las circunstancias para hacer un desesperado retrato de McCain. En cierto modo, no hubiera tenido inconveniente en decir lo que es: un conservador muy estrecho de miras, que ha demostrado tener muy poca palabra al defender una línea de pensamiento conservador moderado y que, en realidad, no puede ser considerado un héroe de Guerra ya que fue derribado cuando pilotaba un avión encargado de bombardear la ciudad de Hanoi (Vietnam) provocando bajas entre la población civil, léase, hombres, mujeres y niños.

Tampoco se ha hecho referencia a que dicha experiencia quiere decir que McCain lleva apoltronado en el Senado americano desde los años 80 y que se vio implicado en un escandalazo por la misma época.
De forma preventiva Hunter hubiera sido el encargado de combatir el fuego con el fuego. De habernos dado una campaña donde las fuerzas, en lo puramente bélico, hubieran estado mucho más igualadas.
De hecho, seguramente Thompson, hubiera caído en la cuenta de que esta América noqueada que sale a duras penas del letargo, del espejismo conservador, ha provocado que de los cuatro contendientes (McCain, Obama, Palin y Biden) tres de ellos tengan hijos destinados en Irak, serían cuatro si las hijas de Obama no fueran tan pequeñas ¿No ha ido demasiado lejos un país que, por razones meramente electoralistas, obliga a sus candidatos a entregar a uno de sus vástagos al ejército? ¿No era eso lo que decía el chiflado de Heinlein, que todos los servidores públicos, que todos los ciudadanos deberían de entregar a uno de sus hijos al ejército y fue tildado de fascista paramilitar? ¿No hacían eso en Roma, en Esparta?


Mañana tendremos nuevo presidente en los Estados Unidos. Espero que gane el señor negro más que nada porque si es verdad que es como Flavor Fab nos vamos a mear, si es como Malcom la va a liar parda y si no pues tendremos que cantar como Britney eso de: “Oops, I did Again!”. O mejor: “Oops, they did it again!”.