sábado, 25 de julio de 2009

Cosas del cine



Nunca entendí muy bien por qué Rodrigo Sopeña y Luis Piedrahita, ambos profesionales de la comedia, se decidieron por dirigir una película como "La habitación de Fermat" (2007) que era un thriller.


No es que la cuestión me desvele por las noches pero, bueno, estoy seguro de que hubieran rendido mucho más haciendo una película para que la gente se riera que una en la que tenían que concentrarse en un misterio de unos matemáticos encerrados en una estancia que se iba estrechando poco a poco -en plan "Cube" (1997, Vincenzo Natali)- a medida que se les pedía que resolvieran un puñado de acertijos.


La comedia ha sido siempre considerada un género menor y, normalmente, no se empieza a tomar en cuenta a un guionista, director o actor hasta que no escribe una historia sobre unos niños refugiados, dirige la historia sobre un hombre que está paralizado de cuello para abajo o interpreta a un pianista sordo que en la infancia sufrió abusos sexuales. Si te dedicas a hacer chistes es mucho más difícil que se fijen en ti y por eso es posible que la dupla Piedrahita-Sopeña se decidiera por una película de género o, a lo mejor, es que sabían de la dificultad de vender en estos tiempos que corren una película cómica.


Vivimos, últimamente, un tufo terrible de películas de terror (un género tremendamente vituperado en nuestro país pese a sus innegables ventajas comerciales en el extranjero), de dramas de todo tipo (predominan los dramas familiares y los conflictos padres-hijos) y de films-espectáculo donde la Tierra se destruye. No negaré que me produce una congoja terrible el nombre de Roland Emerich y su enésima recreación de la aniquilación de la Tierra o que el trailer de Tranformers 2 base todo su punch en las imagenes donde se destruyen las Pirámides o cualquier otra de las joyas arquitectónicas de todo el mundo. Ni que decir tiene que no entiendo el éxito de las películas de catástrofes (desde Titanic hasta El día después) y que no entiendo qué placer hay en ver tanto sufrimiento y tanto volcán rugiente, tantas tormentas perfectas y tantos Cloverfield (A esta animadversión por dicho género se une el hecho de que la cámara no se esté quieta en ningún puto momento).




Otro interesante dato de nuestro cine es por qué películas como "Imago Mortis" (Stefano Bessoni, 2009) o "Paintball" (Daniel Benmayor, 2009) son películas hechas aquí que, curiosamente, se anuncian como películas hechas allí.

Anoche fui a la sesión golfa de Kinépolis a ver "Pagafantas" (2009, Borja Cobeaga) porque se lo debía a su protagonista Gorka Otxoa con el que he trabajado en "Hollywood no existe" y porque las críticas son tan arrolladoramente buenas que era imposible no acabar sentándose en un cine a verla. Borja Cobeaga, su director, llegó a ser nominado por un corto titulado "Éramos pocos" (2005), una comedia, podría haber utilizado sus recursos, pensar en el mercado americano y haber rodado una película seria, incluso me imagino que más gran



de de presupuesto...esto...como se dice eso...más ambiciosa (cuando alguien dice que ha rodado su película más ambiciosa suele querer transmitirnos que es su película "más cara" o "más pretenciosa"). Sin embargo ha preferido mantenerse fiel a su estilo y hacer lo que mejor sabe hacer: comedia.


Una película pequeña, porque este tipo de cine tiene la capacidad de no necesitar demasiados efectos digitales ni sacar un bicho venido de otro planeta zampándose el Guggenheim, que sin embargo es una de las mejores que he visto este año. Entretenida, entrañable, algo tristona pero, sobre todo, bien dirigida y fantásticamente bien interpretada.


Gorka está fantástico (aunque he notado que su buen carácter predispone a todos los que escriben para él a meterlo en las situaciones más embarazosas o dolorosas) y también lo están Oscar Ladoire -tan olvidado, tan grande-, Kiti Manver, Julián López, Sabrina Garciarena...


Que nadie espere grandes revelaciones pero sí la identificación automática del público masculino con la figura principal: un tipo enamorado de una chica que lo considera, sólamente, un buen amigo. Je. Un dolor pequeño instalado en empollones, hombres con mamitis, feos profesionales, gafotas, pusilánimes, delegados de curso y, en general, entre los que, después de ver esta película, francamente me incluyo por haber pasado en distintas etapas de mi vida por situaciones semejantes. En realidad creo que podría haber sido un buen candidato para el puesto de coordinador de la Mesa Nacional de los Pagafantas.


Pues nada gran película...por cierto que he descubierto algunas razones por las que la gente no va al cine,podrían ser estas:


-El personal se comporta como si estuviera en el salón de su casa.


-El personal va acompañado de personas ciegas que coloca a su lado y por eso le va contando los pormenores de la película.


-El personal hace cursos a distancia de adivinación y segundos antes de que vaya a ocurrir algo resulta que lo predice a voz en grito y luego suelta una carcajada.


-El personal acude en verano al cine en chanclas, se las quita y pone los pinreles desnudos en la butaca de delante. Aquí una reflexión: ¿Por qué la gente que va en chanclas se ve en la obligación de quitárselas a la mínima ocasión? ¿Qué pasa que son incómodas? ¿Por qué no se ponen otro calzado entonces?


-El personal sigue utilizando el móvil en la sala para charlar e, incluso, para hacerle fotos a la pantalla de cuando en cuando. Será que estamos perdiendo memoria y necesitan registrar esos momentos inolvidables.


-Pese al sonido THX es imposible que el personal se dedique a comentar desgañitado cada paso de los protagonistas.


-Aviso a las parejas: se me sentaron dos delante anoche y pude comprobar como despellejaban sistemáticamente a una tercera que no había acudido a la cita por tener que atender otros compromisos. Me enteré de que los que faltaban les estropearon las vacaciones a los que estaban porque se tiraban pedos por la mañana y ponían música "del gitano y la cabra" que hacía "tiroriroriro"...al parecer era su manera de definir a The Doors.


-El personal se pone ciego de porros antes de entrar a una película de risa para que le haga más gracia y durante toda el metraje se escucha una risa floja y desacompasada acompañada de un "¿No hay más gominolas? ¿Y nubes? ¡Joder, chico, que hambre me dan los porros!".


Aunque hay muchas y variadas razones pero siempre son muchas más las que me empujan a ir al cine siempre que puedo...¡Id a ver Pagafantas! ¡Que es buenísima!

11 comentarios:

Mario Lizondo dijo...

Dios! Lo de The Doors me ha matado! Aunque me llamen cultureta, prefiero ir a cines en V.O, el público es bastante más educado. Totalmente de acuerdo con Pagafantas.
Enhorabuena por el blog!
Un saludo.

Señor Insustancial dijo...

Hola Mario,

Gracias por pasarte y gracias por los halagos...veo que eres realizador...pues mira, si no lo conoces entra en www.vu87.com. Es un programa en el que trabajo para Antena 3 Neox y que emite (y paga) piezas de realizadores.

Nunca está mal pasarse por salas comerciales porque en las salas en V.O. existen también los comentaristas profesionales. El problema es que no vemos diferencia entre el ámbito privado y el público...

Joder, parezco Ramoncín...bueno que sí, que estoy de acuerdo aunque creo que en todos lados cuecen habas.

Pues nada, pásate por aquí cuando quieras.

Un saludo.

Mario Lizondo dijo...

Gracias, si, la conozco, pero por ahora no tengo ninguna pieza que pueda encajar en el programa, ya que hasta ahora solo he realizado cortometrajes y videoclips.
Si quieres puedes verlos en http://www.vimeo.com/mariolizondo
Un abrazo.

Grom el Único dijo...

Estimado Insustancial, cada vez que oigo hablar de lo fantástica que es "Pagafantas", me crecen los colmillos hasta el punto de que podría lijar el parqué (una manera como cualquier otra de decir que se me ponen los dientes largos). Y es que por las obligaciones familiares que Vd. conoce, la posibilidad de ir al cine nos es tan escasa como de que Eduard Punset entre en "O.T.". Me da muchísima rabia porque tiene una pinta fantástica - pese a la puñetera manía de los distribuídores españoles de venderla como si fuera la "comedia más gamberra del verano" (a lo "Fuga de cerebros"), cuando tiene su puntito melodramático - corríjame si me equivoco -.

De todos modos, y a tenor de lo que comenta sobre la proliferación de ovejas mutantes en las salas, me dan ganas de agarrar al niño y montar durante hora y media el concierto "Antología de temas de Luis Cobos para llanto y berrinche". Aunque sólo fuera como venganza por todas las películas que me jodieron los borregos que piensan que están en su casa viendo una película...

Sip, me hago viejo.

Afectadísimos y hacerlacobráceos saludos.

eduardoritos dijo...

Hay que verla. Obligatorio.

Eso sí, hay que elegir el cine más lejano, y la sesión de las 22.30 del domingo. Es insoportable lo de la maldita gente maleducada.

De todas formas, en el caso de pagafantas, yo me perdí gran parte de los diálogos debido a mi risa y a la de los demás espectadores. Concretamente había en la fila de delante una señora que debía haber jodido la vida de 10 ó 12 pagafantas, y que se reía como una condenada.

Y , efectivamente, Oscar Ladoire, de lo mejor de la película.

Unknown dijo...

Joder, me he reído mucho con las razones por las que el personal no val al cine.

Un abrazo

Jódar

Señor Insustancial dijo...

Hola todos,

Mario,
Emiten de todo...da igual la extensión o la categoría. Tú mismo. Gracias por pasarte, es un placer.

Grom,
Debería de asistir con el niño estrella a una sala, yo le acompañaría. Elijamos una película donde vaya la muchachada, una de esas de tiros y acción con mucha gente musculada y un discurso gay pringado de anabolizantes sumergido en los diálogos. Fantástico, las posibilidades de comentar la jugada con el pequeño o de hablar de los pormenores de su comportamiento ("uyyy, se ha hecho cacotas, vamos a cambiarlo ahora que parece que no están diciendo nada") me parecen infinitas.

Es una pena que la madre del crío no nos lo preste para esta nueva forma de terrorismo cultural...aunque, si la gente lleva un móvil 3G con 2 megas de reggeaton en el bolsillo no entiendo qué hay de malo en portar a un ser humano de menos de seis kilo.

Eduardoritos,
Prefiero la sesión de la 1:00 de cualquier cine (aunque igualmente se ha normalizdo eso ir al cine a horas intempestivas) o la última de cualquier día de diario, preferentemente los lunes que los cines se vacían de personitas.

Lo malo no es reírse´,que es una cosa normal, lo malo es comenzar una competición de ingenio con la pantalla haciendo comentarios para que tus acompañantes se partan el culo de la risa.

Francisco (Jodar),
Yo si que echo de menos tus comentarios en la oficina.


Un abrazo a todos, todos, todos.

luis dijo...

Pues mira, has conseguido que vaya a ver Pagafantas. Aquel día enfrente de la pollería, esperando el gran momento -que nunca llegó- para debutar de extra en "Hollywood no existe" también me pareció un buen tipo y me mola bastante como actor y con su crónica me ha conquistado para la causa del cine español hecho con honestidad y talento porque muchos, yo el primero, no le damos el valor que tienen cosas estupendas que se hacen con muy pocos recursos. Aunque haya directores que perpetran infumabilidades como los Cronocrímenes.

Por cierto, Mario Lizondo, he aprovechado el rebote de tu comentario y me he pasado por tu página de vídeos. He visto God bless you y me ha gustado bastante. Lo colgaré en mi blog si no te importa.

Saludos a todos.

Mario Lizondo dijo...

Encantadísimo Luis! Para mi es un placer! Un fuerte abrazo.
Mario

Señor Insustancial dijo...

Hola Luis,

La verdad es que de "Hollywood..." se cortaron algunas cosas que, por tiempo, no hubo manera de meter. Ya tu sabes. De todas maneras el piloto ha quedado francamente bien, creo que habrá pase en La Pierna a comienzos de septiembre para que todo el mundo pueda disfrutar de él. Yo tengo unas ganas tremendas de verlo con todos vosotros.

Sobre el cine hecho con poco dinero, pues mira, en España es una realidad total y absoluta. No niego el rollo coproducción con muchísimos millones de por medio que dan mucho curro y que luego se venden bien al extranjero (caso de directores mayestáticos) pero es absurdo que en este ridículo debate sobre el cine en España se haya llevado por delante a este tipo de películas que, parece, nadie se arriesga a rodar porque no son rentables cuando, en realidad, lo que las películas tienen que tener es calidad para poder ser rentables. Me refiero no tanto al guión (normalmente en todos lados ciertos bodrios hacen millones en taquilla) si no a que la factura y el acabado sean buenos (como es el caso de todos los bodrios que han sido un éxito).

SObre Vigalondo me callo porque es muy amigo y a mi Cronocrímenes me pareció muy buena por razones que te explicaré con una Alhambra de por medio pero que tienen que ver con hacer ciencia Ficción con muy poco presupuesto y sabiendo manejar muy bien los géneros.

En todo caso, querido Juez, tu palabra aquí es ley.

luis dijo...

Vi hace tiempo aquel corto de Vigalondo que fue nominado a los Oscars y me pareció muy bueno. Por eso alquilé Cronocrímenes en el videoclub pero, a pesar de un comienzo que prometía, me pareció que luego se aturullaba todo lo que ocurría y me quedé con la sensación de quéhasidoesto? Pero vamos, el cine-forum sobre Cronocrímenes y otras cositas del cine español me parece una gran idea.

Efectivamente, el cine sólo necesita talento porque ahora los medios técnicos los tenemos bastante disponibles. Y muchas veces también los económicos si confías en lo que vas a hacer. Yo suelo poner el ejemplo de "Pi", la primera peli de Darren Aronofski. El tipo pidió a familiares y conocidos 100 dólares para hacerla diciendo que si tenía éxito les devolvería 150. Al final, supongo que es tener una idea y tener fe en ella, no?