viernes, 7 de diciembre de 2007

El Club de los Cinco


La primera vez que vi El Club de los cinco (The Breakfast Club, 1985) tenía 12 años y un Sanyo Betamax. Me acuerdo que el catálogo de CIC Columbia era mi preferido: Cazafantasmas, Doctor Detroit, Cuando llega la noche, Fletch, karate kid...era un crío y ya me fijaba en esas cosas. Cada mes llegaba una especie de tríptico con todas las películas con cajita azul y nombres idiotas al videoclub e iba tachando las que iba viendo como, por ejemplo, una absurdez llamada 13 asesinatos y medio que me divirtió de lo lindo pero que nunca he vuelto a ver por estos pagos.

Steve Martin, Richard Pryor, Bill Murray, Dan Aykroyd etc. siguen siendo mis cómicos preferidos y todos ellos hacían aquellas peliculejas. Más tarde descubriría el cine europeo y las cosas de autor pero, desde aquella época de deglución de comedia yanki, lo cierto es que no me puedo resistir a ver todas las chorradas que caen en mis manos.

El Club de los cinco no es una comedia, es más bien un drama teen. Pero me encantó. Está dirigida y escrita por John Hughes que marcó toda una época estéticamente hablando con sus bandas sonoras ochenteras repletas de sintetizadores tontorrones y escenas de bailoteos. Suyas son dos monumentos a la chorrada llamados La Mujer explosiva y Todo en un día que influyeron para que luego alguien hiciera Parker Lewis nunca pierde por el lado tontorrón e Instituto Degrassi por el lado serio, ambas recomendables series de televisión. Seguramente más Degrassi que se acercaba al fenómeno de ser adolescente con temas como el embarazo a destiempo, el SIDA, la delincuencia, padres cabrones con unos personajes más feos que picio que lo acercaban más todavía a la realidad,



Aquellos ¿maravillosos? 80

El caso es que El Club va de cinco muchachos de los más estereotipados (malote, pija, deportista, raruna y empollón) que tienen que pasarse un sábado metidos en la biblioteca de su instituto bajo la supervisión de un director hortera -uno de ellos, el malote dice "¿Sabe Barry Manilow que le ha cogido su ropa?"-.
Pues, el caso es que como tienen que pasarse el día allí escribiendo una mierda de redacción con el tema "¿Quién creo que soy?" se dedican a conocerse mejor. Al final resulta que, en el fondo, y pese a ser unos estereotipos llegan a la conclusión de que no son tan diferentes y se hacen amigos aunque queda la duda de saber si esa amistad se mantendrá viva cuando llegue el lunes y se reencuentren con sus amigos de verdad.


¿Jugamos al "teto"?

Las razones por las que esa película me gustó en su momento se reducen a que tenía 12 años cuando la vi pero resulta que, por casualidad, anoche me la volví a tragar y me encantó de nuevo.
Reconozco que es tramposa, que los personajes no se sostienen en la mayoría de los casos pero:


A) Creo que Molly Ringwald la pelirroja es una de las tías más guapas que he visto en mi vida y que Ally Sheedy me da morbazo total (algún día alguien hará una tésis de porqué me gustan tías tan raras como ella o Jorja Fox (CSI) etc.)


B) Emilio Estevez me parece un actorazo y un pedacho de director. Si no se lo creen vean Rated X, que aquí se llamó Clasificado X, sobre la vida de los Hermanos Mitchell que fueron los primeros directores porno en hacerse ricos y me cuentan.



"¿Quién ha sido el gracioso que se ha llevado las sillas?"

A parte de estas razones lo cierto es que como película me parece excepcional, quizás a la muchachada actual le podrá parecer naïf, tonta e incluso cursi pero tiene un nosequé...seguramente sea que son las primeras películas (otras del tipo de esta fueron 16 velitas o La Chica de rosa) que trataton a los adolescentes como espectadores inteligentes. Ya saben como hacer una película generacional en el punto y hora en que esa gente iba al cine, sin distancia.
Viéndola te daba la sensación de que la adolescencia era un non plus ultra, que no había nada más allá de lo que tenías ahora. Con un punto algo nihilista la película no te planteaba cosas sobre el futuro, sobre lo que harías con él porque en realidad ya te estabas oliendo que no había mucho futuro y que, lo de hacerte mayor iba a ser un coñazo. Ahora lo soy pero yo ya lo sabía entonces. También lo deben de saber los actores que protagonizaron la película y cuyas carreras fueron más bien fugaces.
Judd Nelson que fue el malote guaperas de los 80 se ha especializado en personajes segundones tras una carrera alcohólica y drogodependiente importante que le robó la guapura. En New Jack City hacía de poli cabrón junto al rapero Ice-T.
Anthony Michael Hall que fue el empollón de los 80 se refugió en la priva y ahora se endereza peor que mejor en cosas como La Zona Muerta. Hizo una pequeña aparición estelar en Seis grados de separación. Se le ha puesto cara de vieja.
Emilio Estevez que fue el guaperas bueno de los 80 se ha hecho director tras Bobby que es peliculón.
Molly Ringwald la pelirroja más famosa de los 80 no levanta cabeza aunque, sorpresa, sorpresa, su último papel en cine se lo dio el coñazo de Peter Greenaway en Las Maletas de Tulse Lemper.
Ally Sheedy que junto a Anthony y Emilio formó parte del originario Brat Pack sigue trabajando para la TV y manteniendo parte de su raro atractivo, al menos para mí.
¿Se puede decir que fuera la primera película grunge? Al menos era menos aburrida que Solteros pero creo que fue un retrato adelantado de lo que luego se llamó Generación X. El Tema final de la película es el tristón "Don´t you (forget about me)" de Simple Minds. Si alguien quiere reivindicar los 80 por favor, que hable menos de los calentadores y más de esta película.

2 comentarios:

MerlinaN dijo...

Wau!! sabes que amo esta peli!!
la adoro, me parece que tiene tantos puntos comunes como mensajes interesantes. Es una pelicula de culto sin duda.
La vi un monton de veces, encontre tu blog porque estoy tratando de bajarmela, ya que se me jodio el audio de la que tenia en la compu; ahora la quiero ver y no puedo!
bueno, que alegira saber que somos dos los chiflados ochenteros!! ajaj saludos..

Señor Insustancial dijo...

Hola Merlina,

gracias por venir desde tan lejos hasta aquí y dejarnos un comentario. Culto sin duda y una de mis películas preferidas de todos los tiempos, no se cae jamás de la lista.

Un placer, lo dicho y pasate cuando quieras. Aquí estamos.