El Mundo nos ha dado hoy la alegría mañanera al ocupar parte de la contraportada con la foto de ahí arriba. O sea, que ha copiado al AS y, por apenas dos columnas, se ha olvidado de hablar mal de sus personajes habituales: ZP, de la Vega, Solbes, Rubalcaba, Garzón o los nacionalistas. Guay.
La mujer de los ojos como Candy, Candy se llama Yasmin Fostok y es la hija de un imán radical que atiende a la gracia de Omar Bakrí. Resulta que la muchacha no posa así por placer si no porque es bailarina de barra y hace striptís ocasionalmente. El señor barbudo fue expulsado de Gran Bretaña después de los atentados del 11-S ante su reticencia por hablar bien de los terroristas y comentar, más o menos, en alto que aquello no le parecía tan mal. Se exilió artísticamente en el Líbano convirtiéndose en una especie de Alejandro Sanz del islamismo ya que ambos han encontrado fuera de sus países de origen un lugar más en sintonía con los mensajes propios.
La noticia viene a decir algo así como "¡te jodes, que la hija te ha salido stripper!" dando por hecho que, igual en occidente que en oriente, ciertas profesiones son todavía vistos bajo un punto de vista muy conservador. Es decir, la muchacha es tratada bajo la misma vara de medir moral que usa su padre, se habla de su "agitada" vida sexual (le contabilizan seis novios y uno de sus ex, despechado, dice que es muy "activa" en la cama), de su actitud procaz y de ser una partidaria de la vida bohemia. Yo me imagino que si la muchacha se hubiera casado por la iglesia anglicana con un contable de Oxford y hubiera traicionado, del mismo modo, los preceptos islámicos seguramente la doble de El Mundo hubiera sido ocupada por los consabidos personajes o quizás por un desmentido de Aznar sobre su vida amorosa.
"La familia, que se podía esperar de semejante mezcla de sangre" escribió Roger Wolfe y no le faltaba razón. Bin Laden fue retratado como la oveja negra de una familia cuasioccidentalizada y, de cuando en cuando, una sobrina de Rouco Varela se desnuda en Interviú o conocemos la existencia de un hermano de Cesar Vidal que se confiesa "votante socialista" y completamente contrario a las tésis de su hermano. ¿Qué se puede esperar de semejante mezcla de sangre, efectivamente?
Época nos informó la semana pasada de que Marichalar, yerno del rey con la convivencia interrumpida o sea suspendido de sus obligaciones como yerno, ocasionalmente (no sabemos si con la misma ocasionalidad que se desnuda la hija del Imán) gustaba de hacerse unas filas de farlopa. Se ha montado la zapatiesta porque la Familia Real no hace honor a su nombre, o sea, que realmente no es una familia al uso y estas cosas se le miran con lupa. Lo de los pantalones de amebas, las pashminas de vívidos colores y los paseos del brazo de viejas modeluquis con problemas de dislexia es una cosa y otra darle al vicio...eso dice la gente que sale en la tele que, pese a que todos sospechamos que no son ajenos a cuernos, disputas vecinales, divorcios y farlopa ponen cara de "¡Esto es lo último!" cada vez que surje uno de estos temas demostrando que se puede vivir de dar lecciones de honestidad y buenas maneras.Mi abuela Petra diría eso de "¡Sepulcros blanqueados!", que es la frase con la que te recuerda que eres un fariseo de la peor calaña.
Si en tu familia no hay una stripper, un integrista religioso o un tipo que se presenta a las celebraciones familiares gastando capa española seguro que tendrás alguno de estos fenotipos:
-"El que se quedó tonto de estudiar": Suele ser un primo lejano de lugar ignoto que tras pasarse estudiando tres años para notarías prorrumpió entre alaridos en la Plaza del Pueblo vistiendo un gorrito de papel de aluminio en la cabeza. Tras ser reducido por la Guardia Civil estuvo en un manicomio. Te lo cruzas en alguna boda o comunión vistiendo de übergañán y gafas de culo de vaso. Fuma como un murciélago y dice cosas inconexas mezclados por comentarios de gran lucidez como "el gobierno envenena el agua" o "los curas son los padres". Semejantes frikazos ya no salen tanto de casa porque suelen ser administradores de páginas de OVNIS y conspiranóicos en general y te ahorran el mal trago.
-"El cabeza loca": Antes los "cabeza loca" emigraban al extranjero de donde volvían colgados del brazo de una francesa o alemana a la que la familia conocía cariñosamente como "esa guarra" o "esa pelandrusca" porque la buena mujer fumaba y llevaba bikinis soliviantando al Frente Paco Martínez Soria de la población. El "cabeza loca" suele ser el responsable de haberse "gastado la herencia de padre" (dos trozos de tierra y una casa semiderruída en medio) en negocios locos como un puesto de helados o el estudio del motor de agua. En sus apariciones suele acusar al resto de la familia de tener poca visión y da sablazos a tutiplén. Irremediablemente causa admiración entre los sobrinos a los que lleva, según el grado de generosidad o de pecunio, a tomar sus primeros chatos de vino, les compra tabaco o los lleva de "putánganas" que es la forma fina que usan las hermanas de mi padre para referirse a las prostitutas o a las mujeres de moral distraída si no usan lo de "pelandusca". Ah, si el cabeza loca de la familia triunfa se convierte en "el cachondo del tío nosequé" y se dice que "es más listo que el hambre como su padre". De su señora, la pelandusca, se dirá que "es moderna y europea" o "que está con los tiempos".
-"El estirao": Este no se quedó gilipollas de estudiar pero casi. Aprobó un oposiciones y ahora tiene lo que la abuela llama "¡Un puestazo!" que suele ser pasante de un notario, jefe de administrativos, chupatintas o funcionario de grado medio. Como vive en la capital se casó con una mujer que no sabe ejercer de cuñada y que, a la mínima, pondrá de vuelta y media a la familia política provocando todo tipo de enfrentamientos. Sus hijos suelen ser esos primos que van a colegios concertados y visten desde peques con Lacoste. Te miran mal porque su madre les dice que no se junten contigo porque eres "un salvaje" pero de adolescente te emborrachas un día con ellos y te haces amiguete. "El estirao" es el que suele acabar demandando al resto de la familia por la herencia (ya digo, dos metros cuadrados de tierra que rodean una choza ruinosa y/o el conjunto que es conocido como "las joyas de madre" -unos pendientes- o "las cosas de padre" -normalmente una escopeta que una vez mató a una liebre, un retrato del bisabuelo...-) suele leer el ABC y cree saber de todo. Un mierda profesional peligroso.
-"El artista": En todas las familias hay alguien que quiere sobrevivir siendo actor, poeta o músico sin tener mucho talento para ello. Irrumpen en las reuniones familiares con una pareja bastante extraña. Ellas con un hippie que huele a hierba, se ríe de todo y se levanta tarde y ellos con una dietista, una argentina con un perro o una chica calladina y gordita. Cuando alguien le recuerda que tiene que hacer algo de provecho, suele ser "el estirao", se solivianta y amenaza con abandonar la casa gritando "¡Dejadme ser libre!" o "¿Qué sabes tú de arte?". Sospechas que él tampoco sabe mucho porque una vez lo vista actuando en un teatrucho de mierda. La ventaja de hacerte amiguete de "El artista" de la familia es que si vive en tu ciudad puedes usar su casa como ocasional picadero, siempre lleva porros y tiene amistades más o menos chifladas y/o interesantes. En contrapartida te estará esperando cuando cobres tu primer sueldo para sacarte las cañas a partir de entonces. Quid pro Quo.
-"El gayer": El fenotipo gaylord aparece en familias con tiendas y estancos principalmente por lo que suelen quedarse en el pueblo para acabar atendiendo el negocio familiar. La familia, a cambio, se hará la tonta sobre la condición sexual del hijo o hija y jamás le hará preguntas sobre sus visitas de fin de semana a la capital más cercana. Ahora, que la cosa es más relajada, el gayer suele ser visto con mucha más relajación y presentan al novio/novia como tal y no como "una entrañable amistad" permitiendo una convivencia mejor. De todas maneras, normalmente, el gaylord de la familia suele verse envuelto en una pelea familiar donde se le llama "maricón" o "bollera despectivamente. Se lía. Ha desaparecido, afortunadamente, el familiar gayer que permaneciendo en el pueblo se liaba por necesidad o ternura con el tontico del pueblo o, lo que es lo mismo, con el miembro de otra familia "que se quedó tonto de estudiar". Cosa esta de la leyenda negra popular. A veces "el gayer" y "el artista" son la misma persona. Viven en Madrid en pareja, se han casado y planean la adopción de una chinita y dicen de sí mismos que están "normalizados".
-"Solterones": El que se ha quedado para vestir santos, a veces también resulta que "Gayer" y "solterón" son la misma persona y, remotamente, se da el caso del "gayer solterón" que se hace "artista" y termina ejerciendo de estrella en un espectáculo de travestidos. Lo normal es que la solterona sea una avinagrada de mucho cuidado que espantó a todos los posibles pretendientes y el solterón se dedique a cubrir la plaza de "borrachín" del pueblo. El solterón ha descubierto que ahora se puede ir a Sudamérica o El Caribe y traerse a una mujer de allí. La solterona se conforma con soltarte dinero por debajo de la mesa, justificar tus borracheras y tus ausencias y despacharse a gusto echándote la bronca sin que se entere nadie.
Y así hasta completar un cocktail de genes infernal. De todas maneras si no fuera por la familia no sabríamos lo que es una buena pelea a navajazos en el salón de casa; una competición por ver quién acude mejor vestido, comprobar la bajeza del ser humano al abandonar a los viejitos una vez les han limpiado la cuenta y otras lindezas. A la familia también le debemos frases como "Es que este tiene una mamitis..."; "El día menos pensado me voy de aquí y se os come la mierda"; "Cuando se nos querrá llevar el señor"; "Sales más caro que un hijo tonto"; "esto no es un motel", "cuando seas padre comerás huevos", "No haberme tenío", "Si ese se tira de un puente tú también", "es que eres idiota, has salido a tu padre", "claro cuando queman una sinagoga son hijos míos pero si aprueban la gimasia son tuyos solo" y así hasta la nausea...pensad que de no existir los parientes hubiera sido imposible que Emilio Aragón hubiera montado su emporio y la Conferencia Episcopal el suyo.
4 comentarios:
¿Ojos que qué? Pero quién puede mirarla a los ojos?
Si en tu familia no hay una stripper, un integrista religioso o un tipo que se presenta a las celebraciones familiares gastando capa española seguro que tendrás alguno de estos fenotipos
Añadiría el tocagüevos y el julandrón. Pero cada familia es un Mundo, ofcurs.
creo que eljulandrón y el tocagüevos están incluídos en la lista posterior....
Un abrazo enormeous
Merhaba amigo insustancial, ¿kaif al-haluka?
Te veo en plena forma compañero. Estaba yo ultimamente un poco preocupado con tu esimismamiento, con ese "hayayay que las musas s'han pirao...". Pero veo que la sangre vuelve a hervir. Eso mola.
Tu entradita, pues qué te voy a decir ¡genial! como casi siempre.
Verdaderamente semos todos un poco raretes. El que diga que no que tire la primera piedra!
Yo, sin ir más lejos, cuando siéndo un tapón de ocho años y en mi cole me castigaban con orejas de burro y rabo de cartulina (que ya tenían que ser cabrones los profes de los cojones!, añadiré que lo eran)salía a la calle y miraba como todo el barrio se mondaba a mi costa. Yo sentía verguenza ¿cómo no? pero pensaba: soy un burro, soy un burro... y la verguenza se me pasasba y pensaba: estos gilipollas de que carajo se rien? ¿no han visto nunca un burro?... y así, y de misa en misa en los salesianos de Sarriá, y viendo el mundo desde detrás del cristal que yo elegía, plácidamente, se creó esto que hoy, leyendo tu artículo, siente admiración por aquellos que son burros con patas, rabo y orejas de cartón, que miran las noticias en la tele y no comprenden que coño están haciendo con el mundo y con la gente y, que cuando algún politico rampante asoma la testuz apunta con el dardo robado en un pub irladés cuando el borracho O'Donell o Liam o Brian bebía y piensa: riete, riete que algún día los burros gobernaremos la tierra!
Quien rie último, rie mejor...dicen...
Un cordial saludo camarada!
Andaba yo también preocupado con tu ausencia, amigo Enric. Ya que estás de nuevo pues eso, bienvenido.
La cosita está fatal pero no hay que cejar en el empeño de ver las cosas desde otra prespectiva incluso más superficial todavía. No quiero implicarme. Adopto la postura Ferlosio: me ensimismo, me enroco y me quedo donde estoy dando los pasos que a mi me de la gana, doy mi opinión si me apetece y siempre sobre el tema que me apetece. Hace tiempo que no tengo ganas de discutir. De reírme sí.
Así anda el mundo amigo desde aquí a Castellón, por lo menos.
Un abrazo y ya me contarás como era eso de que os pusieran orejas de burro y cola...¿Colegios de la Gestapo, quizás? Y luego dicen de la educación de antaño.
Publicar un comentario