martes, 29 de julio de 2008

¡La descojonación!


El título de este post es un sentido homenaje a Segundo el personaje que Luis Ciges interpretó en la trilogía de La Escopeta Nacional (Patrimonio Nacional y Nacional III).

La frase me viene siempre al pelo. Es una frase que puedo gritar cuando algo me hace reir o cuando algo me hace llorar. Si alguien grita "¡Esto es la descojonación!" nunca sabrás si está ante algo bueno o algo malo.

Hoy he gritado "¡La descojonación!" varias veces mientras veía la nueva miniserie de Antena 3: 700 euros. Diario de una callgirl.
Bien, le agradecemos a Antena 3 que nos informe del precio exacto que ha pagado por el guión de esta bazofia catódica, más hubiera sido un robo manifiesto. Mal porque nos despista con lo de callgirl que es una forma finísima de decir "señora puta", peor que ponga Diario de... porque uno piensa que, de un momento a otro, va a aparecer Mercedes Milá echándole la bronca a alguien por fumar.

Bueno, a lo que iba, que la serie es una descojonación en toda regla. Va de una muchacha de pueblo enamorada de una persona muy mala. Una persona que tiene pinta de chuloputas y parece haber hecho un MBA en chuloputismo y aviesa maldad. Encima le pone los cuernos con su hermana. ¿Es ciega la muchacha para no ver que el tipo se la va a jugar? NO, es simplemente una idiota redomada porque el tío, de verdad, que es malo que te cagas. Ella está cegada de amor.


Para rematar la cosa, y que no haya duda de que es un poco retarded, decide dejar el pueblo cuando se entera y marcharse a la capital...¿Les suena este comienzo? He calculado (aunque tendría que comprobar los datos en IMDB) que debe de haber unas 100.000 producciones con ese arranque.
Todas del anterior siglo, claro, porque a nadie se le puede ocurrir que en este pais, a estas alturas, alguien deje su pueblo después de una desengaño amoroso para instalarse en una pensión de mala muerte.

Rancio y con una moralina que haría vomitar a un meapilas. Eso mola. La descojonación, vamos.

Pues el caso es que la muchacha llega a la capital, le roban la maleta con todo lo que tiene (como si fuera Paco Martínez Soria) y se enamorisca de un actor en ciernes y luego, al parecer, se mete a puta...bueno, a callgirl...primero a camarera de un club de alterne megapotente y luego a callgirl...bueno a puta.

Lo mejor es que siendo camarera enseña al camarero del puticlub....bueno casa de masajes...a hacer un cocktail, un Tequila Sunrise, nada más y nada menos y dice: "Es que mi madre tiene un bar en el pueblo...".

¿Los camareros de su pueblo preparan normalmente cócteles de este tipo? En el mío debemos de ser unos atrasados porque, lo normal, es que su idea de un combinado sea la clarita de casera/birra o fanta limón/birra. Se acabó.

Los guiones en España, además de rancios, suelen estar completamente alejados de la realidad. Periodistas que viven en mansiones, médicos que emplean chachas andaluzas que te cuentan un chiste cada segundo, tíos con aspecto de Antonio Resines que son capaces de tener un sueño que dura cinco años...o sea, lo que viene siendo una descojonación, vaya.

Después se le pone otra buena ración de obviedad y tópicos: novio actor que termina en coma, prostíbulos selectos donde clientes ricos se dan a las ¡mayores perversiones! (por ahora se ha visto a una tipa echándole cera caliente a un tío en el pecho, no parece que eso vaya a ser la casa del Marqués de Sade), chulos de putas clavados a Tony Cantó y un encontronazo violento con el exnovio...y ya tienen ustedes una buena ración de paridas televisadas.


Lo mejor es que vean ustedes esta serie, si les place, en clave de comedia, como si vieran un documental falso tipo This is Spinal Tap!, de hecho, esta serie podría ser perfectamente el Spinal Tap de las peliculas sobre call girls...bueno, putas. Así, la verdad, es que gana bastante. De hecho creo que si, por ejemplo, contratáramos a todos estos guionistas para hacer dramas pero luego los vendiéramos como comedias viviríamos una nueva edad de oro.


¡Ciges, le echamos de menos! ¡Te rezamos para que acabes con esta descojonación!


2 comentarios:

Edu Galán dijo...

Lo único positivo de la serie es que recoloca a Toní Cantó donde nunca debió salir.

Señor Insustancial dijo...

EFECTIVAMENTE.