jueves, 9 de octubre de 2008

Yo copio, tu copias, él copia...



Han pillado a Enrique Bunbury "intertextualizando" cosillas de poetas minoritarios como Casariego o Sarrionandía. Vaya. Todos tranquilos, no pasa nada. A Lucía Etxebarría la cogieron metiéndole mano a la obra de Antonio Colinas, a Prozac Nation de Elizabeth Wurzell y a un artículo del psicólogo valenciano Jorge Castelló; a Ana Rosa Quintana, con negro de por medio, la cogieron apropiándose de Danielle Steel y Ángeles Mastretta para escribir Sabor a hiel, una novela sobre el maltrato que Planeta lanzó a bombo y platillo y cuyo título te hacía acordarte de Sabor a ti el magazine de tarde que presentaba la actual diva de las mañanas y los guionistas de Los Serrano plagiaron un episodio de Angel para narrar la muerte del personaje de Belén Rueda mientras que en El Hormiguero (Cuatro) se nutre, básicamente,de experimentos científicos que han sido llevados a cabo por programas como Brainiac (Sky One) o Cazadores de mitos (Discovery Channel).




¿Alguien puede decirme la diferencia que hay entre el programa de Karaoke de Antena 3, Canta Singstar y el que presenta ahora Angel Llacer en La Sexta actualmente? ¿Los presentadores? ¿Que ocurrió con aquella serie de televisión que iba sobre unos tipos que eran como los de CSI pero que interpretaba José Coronado? ¿Alguien se acuerda de que José Frade demandó a Globomedia por la autoría de Médico de Familia y estrenó sin éxito una versión en Antena 3 llamada 3 hijos para mí solo protagonizada por Enrique Simón y Beatriz Santana? ¿Por qué guardo toda esta mierda en mi cabeza? ¿Alguien puede tirar del tapón?


¿A nadie le ha llegado el típico texto de El Club de la Comedia con el encabezamiento de "leed esto que es buenísimo" y te das cuenta de que el que lo hace circular quiere que pase por ser algo suyo?Antes de que Pablo Motos descubriera que él también podía fusilar el trabajo de otros descaradamente era una cosa que molestaba especialmente a ese pequeño Hércules de la comedia.

Allá por los años 70 (y durante bien entrados los 80) las películas tardaban muchísimo tiempo en estrenarse en nuestro país, es decir, lo normal es que llegaran con un año de retraso lo que era aprovechado por más de un pillo o dos (Como el irredento mago Juan Piquer Simón) para rodar una explotaition sobre el exitazo de taquilla de los USA, país que visitaba para ver películas o presentar las suyas propias. Si ellos hacían Superman o The Abyss aquí Juan Piquer ya estaba estrenando Supersonic Man o La Grieta (trash puro en la que salía Pocholo haciendo de un sueco llamado Sven).


Dicen que el director valenciano aseguraba que fue invitado al rodaje de Superman II -es cierto al menos que su película 1000 gritos tiene la noche fue un éxitazo de taquilla en dicho país y él es una pequeña celebridad del circuito underground- y sugirió que su película (Supersonic Man) era mejor porque la capa del héroe se movía con el viento y la de Superman no. Les tuvo que explicar, a esos pringados de yanquis, que conseguía dicho efecto poniendo un sencillo ventilador bajo la capa...¡Y se lo copiaron!


En el 83 repitió la hazaña de la explotaition rodando Los nuevos extraterrestres (con capital alemán si no me equivoco) que era un remedo de E.T., el extraterrestre.


Como leyenda urbano-cinematográfica se cuenta también que sus productores le pusieron como premisa inexcusable la contratación de una estrella internacional para producir la costosísima Misterio en la Isla de los monstruos (1981), que fue una de las películas españolas que recuerdo que tuvieron más promoción en la época y que vi en los desaparecidos cines Windsor (en los bajos del edificio achicharrado). Como la cosa estaba justa a Piquer, un puto genio, ya digo, se le ocurrió una jugada maestra: contratar a Terence Stamp, que estaba muy de moda porque había sido el malo de Superman II, por una sola jornada de rodaje que era lo que podía permitirse ¿Y cómo iba a ser el prota con una sola sesión? Fácil. Al comienzo de la película Stamp se desfiguraba la cara y aparecía en toda la película con la jeta tapada y siendo sustituído por un actor de palo. Al final se quitaba las vendas de la cara y aparecía de nuevo su rostro. O sea, rodó el comienzo y el final en el mismo día y se ahorró unas buenas perras. Si tenéis tiempo echadle un vistazo a esta película -una joyica- en la que sale también Peter Cushing y actores de serie B como Paul Naschy, Frank Braña (un fortachón que ha hecho más de 150 pelis) y Anita Obregón haciendo de jovenzuela sepsi que es lo que era cuando era jovenzuela y sepsi.


Copiar o apropiarse de las ideas de terceros es casi una industria en nuestro país: volved por un instante a las estanterías del videoclub de vuestro barrio y os daréis cuenta de la cantidad de veces que os han colocado películas como Alien DOS, Robocop DOS o Porky´s 13 como secuelas de las películas famosas cuando en realidad no eran más que películas de producción italiana baratuna de sospechosa procedencia cuyo distribuidor en España había cambiado el título para que te comieras el sapo...


En todo caso existe un número de jetas parecido que opera de forma parecida pero con la salvedad de que, en la actualidad, un simple vistazo a internet (algo a lo que puede acceder cualquiera) nos informa de lo que se está viendo, estrenando o leyendo en tiempo real en cualquier parte del mundo y eso tiene sus grandes ventajas.

Peor que peor es que la copia siempre queda peor. Sí. Los versos de Casariego se desvirtúan cuando Bunbury los retoca para hacerlos suyos y que quepan entre las cuerdas de la guitarra; los experimentos de Flipy (por mucho ánimo que le ponga) siempre quedan mal delante de la pasta desplegada por los gafarrones de Mythbuster y, coño, por mucho que la capa se moviera Superman es una cosa y Supersonic Man una guarrería.

El intertextualizador se protege: Bunbury dice que en la "cultura popular" lo normal es copiarse unos a otros; Etxebarría dijo sentirse "violada" cuando Interviú publicó lo de sus libros, Ana Rosa contó que todo era un fallo informático, Pablo Motos que es más cuco calla como un zorro pero, en realidad, lo mismo podrían decir los señores que fueron pillados produciendo caramelos hechos con leche de dudosa procedencia. Ellos podrían decir: "Bueno, se parecen a los originales y saben casi igual excepto porque los nuestros tienen la ventaja de saber a amoniaco y dejarte los riñones al jerez pero...¡Somos más baratos!". No me imagino yo a una madre coraje como la Etxebarría dejando que su progenie se tragara uno de esos caramelos baratunos por muy parecidos que fueran a los de verdad.

Sin duda hay que tener alma de baratillo para hacer cosas de baratillo.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Tema delicado este. Lo de Bunbury no lo sabía; pero de todas maneras lo de la Quintana me pareció especialmente sangrante; siempre he pensado que ella sabía que su publico potencial era la gente que nuca lee, así es más fácil plagiar. Y en cuanto a lo del Hormiguero no le daría mucha importancia, una cosa es pensar un argumento y escribir un libro y otra hacer experimentos, que en la tele se van a ir repitiendo una y otra vez en distintos programas, igual que esa imagen de no sé dónde donde un montón de tíos se tiran cuesta abajo por una colina detrás de un queso, y que cada puto año ponen en todos los telediarios.

Anónimo dijo...

Estupendo post, sí señor. Sí que tienes facilidad para retener información basura... Por cierto, cuando estuve estos días en México me topé con un periodista argentino que me confesó que firmó el manifiesto anti-Boyero, arrepintiéndose a los cinco minutos. Literalmente flipó cuando conté en mi ponencia los negocios sucios entre Erice y Kiarostami, germen de la cruzada. Y luego van de puristas... Un saludo

manu dijo...

En fin, dentro de lo malo, Bunbury no ha tenido mal gusto a la hora de copiar.

Recordarás cómo en los 80 estaba de moda restar mérito a los japoneses diciendo que lo copiaban todo. Pues nosotros no hemos aprendido nada a base de fusilar.

Al comienzo de la película Stamp se desfiguraba la cara y aparecía en toda la película con la jeta tapada y siendo sustituído por un actor de palo. Al final se quitaba las vendas de la cara y aparecía de nuevo su rostro.
Ese tío era un genio, leñe, un crack. La de series que podría estar grabando ahora para la tele.

Paria dijo...

Ahhh el apasionante mundo de los plagios, que se lo pregunten al canto del loco, que parece que vive de sablear a platero, o las "pequeñas" ideas para melodías que coge mikel Erentxun de vez en cuando. También se le puede preguntar a Quim Monzo que al parecer domina el tema.
Pero al margen del plagio, casi todo es reciclado de ideas anteriores. Hulk de Jeckyll y hyde. House de Sherlock Holmes.
Shakespeare tiraba de Plutarco.
También Tolkien sablea las mitologías célticas, nórdicas y cristianas a saco, no hay más que recordar que por ejemplo desde gandalf a todos los nombres de los enanos del hobbit están sacados de un listado que aparece en las Eddas antiguas.

Señor Insustancial dijo...

Lo que no entiendo es que, a estas alturas, gente como Bunbury con cierto status y cierta etiqueta de "creador" y "artista" y todas esas cosas se permita ese lujo sabiendo que siempre está en el ojo del huracán y que, tarde o temprano, alguien iba a caer en la cuenta.

Cortijo, con disgusto leo que cesas en tu blog...una penica jodío pero me imagino que estarás hasta arriba de trabajo. Ya meteré las nuevas direcciones para que la gente pueda seguir leyéndote y que no te perdamos la pista. Lo del tema de Boyero parece que ha perdido todo el fuelle pero voy a seguir manteniendo el blog durante un tiempo a ver que ocurre. Me da mal rollo que estos se hayan puesto la etiqueta de grandes creadores y no dejen a nadie ocupar dicha parcelita...son cosas de un pelo malísimo. Erice lo que tiene que hacer es rodar una película y dejarse de mandangas o que diga que se retira como Gutierrez Aragón.

Manu, de acuerdo total pero, lo cierto, es que Bunbury ha querido jugárnosla buscando poetas malditos que me imagino pensaría nadie lee excepto él. Yo reconozco que en mi vida había leído nada de Sarrionandía. Y sí, Juan Piquer Simón es un personaje para seguir...la verdad es que se merece un homenaje porque es uno de esos directores rarísimos españoles que ha recaudado dinero por todo el mundo, es respetado y se ha currado el rollo cutreluxe de una manera que está más allá de lo humanamente soportable pero, sin embargo, sus películas tienen una ingenuidad entrañable y una falta de presupuesto evidente. Yo creo que a costa de ser malas, en realidad, son buenísimas.

Hosti, Paria, se me había olvidado lo de Mikel Erentxun y su "uno más uno son siete"...

Shakespeare como todos los escritores del siglo de Oro tienen patente de corso ya que ellos se consideraban parte de una tradición literaria basada en la "imitatio" y en la reinterpretación de los clásicos...ellos no escondían que sus obras estaban basadas en textos del teatro o la poesía griega. Es,a partir de la publicación de El Quijote y, sobre todo, de la picaresca española (en ese momento nosotros marcábamos la moda) los escritores comienzan a crear de la nada -más bien de la realidad- y se convierten en "creadores" con marca de creadores...

Un saludo y gracias por aportarme tanto.

Anónimo dijo...

Los planetas son especialistas en plagiar de todo... y luego van de modernos y super guays de la escena alternativa española... en fin...

Señor Insustancial dijo...

¿Los Planetas? ¿En serio?

Pues soy fans...qué disgusto...ya nos contará cuando y donde.

Un saludo y gracias por venir.