miércoles, 6 de agosto de 2008

Secundario en NY



Octubre de 2004. Nueva York. Estoy en Central Park buscando el Loeb Boathouse donde he quedado para desayunar. He decidido caminar a pie desde Harlem donde duermo. Una hora y media de camino pero me da igual porque la ruta me da para pasar por la puerta del Museo de historia natural, el Edificio Dakota y descansar cinco minutitos en Strawberry Fields para sacarle una foto al mosaico homenaje a John Lennon antes de que llegue el hippie que lo decora con flores y fotos del gafotas de Liverpool. No he tenido suerte y el perroflauta yanqui se me ha adelantado de nuevo y me ha pedido cinco dólares para despejar la zona. "Te doy diez si dejas de destrozar canciones con la guitarra" le he dicho. Su perro me ha ladrado y el tío se ha puesto un poco coñazo diciendo que "¡El parque es mío, colega! ¡Vengo aquí todas las mañanas! ¡Como John y Yoko!" he tenido que pasar y seguir caminando.


Le he hecho la foto con la decoración de flores, de velitas rojas, ha quedado aparente. Como estoy desorientado he salido fuera del parque. Me he encontrado con la fachada del imponente edificio Dakota. Otra foto. Después haciéndome el longui he ido hasta la puerta. Hay más gente de más páises haciéndose también la longui. Todo el mundo quiere hacerle una foto al interior del edificio pero es imposible porque un portero chicano, enorme y amable, te corta el paso preguntándote muy amable eso de: "¿Ha quedado citado con algún huesped, señor?. Yo estoy en la lista de los visitantes potencialmente peligrosos. Alguien debería de colgar una placa donde pusiera: "Desconfiando de los gordos con gafas desde el 8 de diciembre de 1980...eso va para tí también Señor me tiro a las niñas Polanski".
Roman Polanski también la lio parda en este edificio rodando La Semilla del Diablo...que en realidad no es un título si no un spoiler. Polanski tuvo muchos problemas con la ley por una acusación de violación a una menor y, desde entonces, no puede entrar en Estados Unidos donde tiene una condena en suspenso de 11 años por este hecho. Además, para darle veracidad a una escena de la película, tiró a Mia Farrow al medio de una calle para captar todo el pánico de la escena. La Farrow estaba casada con Sinatra y a Frank no le hizo gracia el asunto o quizá sí porque ese mismo año se divorciaron.

Estoy desorientado, en realidad no se donde coño está el famoso Loeb Boathouse aunque sale en 8000 películas como Misterioso Asesinato en Manhattan. Me vuelvo a meter en el parque y enfilo la cuesta por donde corren todos los neoyorquinos. Me siento gordo y lento entre toda esta gente que hace footing. ¡América, tierra de contrastes! ¡gimnasios y diners abiertos las 24 horas! ¡Rebajas en marcapasos!

El caso es que, desde lo alto de la cuesta, veo por fin algo que me recuerda al sitio famoso y comienzo a caminar montando un pollo de tráfico porque a estas horas (no son más de las 8 de la mañana) todo está atestado de ciclistas y corredores y yo estoy en medio, con mi mochila, mis kilos, mi pantalón de explorador-turista y mi lentitud, como una piedra en medio de un río de dos direcciones. Soy como Frogger, la ranita del videojuego esquivando personas y trastos con ruedas. Cuando llego al otro lado he escuchado la expresión "¡Aparta, hijo de puta!" por lo menos en seis idiomas. ¡América, encrucijada de culturas! ¡Crisol de razas! ¡Esto si que es cosmopolita!




El caso es que llego a la puerta del Loeb gracias a la ayuda de un policía que me ha visto francamente despistado. Es un sitio estupendo. En mi chifladura espero encontrarme con Mia Farrow, Diane Keaton o, por qué no, Woody Allen. Los tres han rodado aquí y, a muy poca distancia, en la balaustrada del Bethesda Terrace (al otro lado de este mismo lago) rodó una escena de Desmontando a Harry (en la que Robin Williams descubría que estaba desenfocado). También una de las escenas de Godspell y bueno, sobre el puente, una escena de Los Inmortales. No se: ¿Será NY una ciudad en medio de un plató? ¿O un plató en medio de una ciudad?





Me fumo el cigarrillo de antes de entrar en los sitios. Ya me he acostumbrado a que me sepa fatal, pero tiene su justificación: el humo les sirve para identificar a los extranjeros así como lo de beber en la calle sin ponerle la bolsa de papel marrón a la cerveza que acarrea una advertencia primero y una multa después. Una multa o la cárcel porque aquí los policías no se andan con hostias. De hecho tienen una cosa que he conseguido identificar como multas de "baja intensidad". Tu perro hace caca en un sitio no autorizado: 100 dólares. Fumas en un lugar no autorizado: 75 pavos. Tocas el claxon en una zona residencial:100 pavos. Bebes una birra en una terraza no autorizada sin la bolsita: 13o pavos. Es decir, podrían poner multas altísimas que, como en España, todo el mundo evitaría pagar por lo que prefieren poner multas bajas que recaudan, normalmente, en el acto. Si no las pagas te llevan a comisaría y te lo hacen pasar mal, te fichan por obstrucción a la justicia, resistencia a la autoridad...o sea, que te devuelven a tu país de origen. Ayer por la noche vi como se llevaban el perro de una señora por no querer pagar una multa. La mujer lloró mucho pero, la verdad, pasaron bastante de ella. Le advirtieron que sacrficarían al pobre perro cagón en dos días si no pagaba la multa.

El caso es que estoy en el Loeb. Esperando a mi cita. Cuando veo pasar a un tipo corriendo metido en un chandal negro. Lleva cascos. ¡Hostias, lo conozco!
Mientras el tío va pasando hago el gesto de internacional de "¡Ey, tío! ¡Eres Famoso!" o sea, levanto el dedito índice de la mano derecha apuntando hacia su pecho y pongo cara de lelo (media sonrisa que intenta ser cómplice). El tipo se da cuenta pero sigue corriendo. Lo sigo viendo correr pero, de pronto, el tipo se para y corriendo hacia atrás (como si Dios lo hubiera rebobinado) se coloca frente a mi. Después alguien da al play. Extiende su mano y habla:

-"Encantado...".

-"Encantado" Choco su mano "Es usted Tony Roberts".

-"¿Eres español, verdad?".

-"¿Como lo sabe?"

-"¿Se ven mucho las películas de Woody Allen allí? Es que siempre que alguien me para por la calle suele ser español...pero hace años que no trabajo con Woody".

-"Da igual, es usted un gran actor..."
-"Sólo soy un secundario...".

-"Gracias por saludarme, Señor Roberts".

-"Gracias a tí por recordarme que soy una estrella. Ahora tengo que seguir corriendo. Di en España que todavía estoy vivo y que hago mucho teatro".

Se alejó entre risas. Estaba hambriento. Mi cita se retrasaba. Chachi. A desayunar. No espero porque todavía tengo que hacer mil cosas y quiero salir de Central Park.

Me siento en la terraza del Loeb, lo más cerca posible del embarcadero con el New York Post (cuesta 25 centavos y es sensacionalista hasta la médula). Lo he comprado porque anoche en las noticias dijeron que habían encontrado cuatro cadáveres al lado del Hudson. Al parecer fueron asesinados por la banda de John Gotti y se sospecha que uno de ellos podría ser el del vecino que atropelló accidentalmente a su hijo Frank y que lleva desaparecido desde entonces. Todo parece sacado de The Sopranos y está escrito como tal. De hecho, aunque se están celebrando elecciones, el Post le dedica la portada a este tema más que nada porque es casi un periódico local pero con un mercado de 17 millones de almas. Rebosa sangre en cada página. Disparos entre bandas rivales en el Bronx o en Harlem que es retratado como una especie de zona de guerra...duermo por allí y es un barrio muy plácido pero, cualquiera sabe, tengo un sueño muy profundo y todas esas noticias que hacen que quieras salir corriendo: violaciones, asesinatos, robos, asaltos a extranjeros despistados...





Gotti fue un tipo que ascendió a la jefatura de la Familia Gambino reventando cabezas. Un monstruo con ínfulas de estrella que no escondía que era jefazo de la mafia y que se rió durante años del sistema judicial y policial americano. Básicamente era un filántropo con dos pistolas. Se murió en 2002 de cáncer, en la cárcel y su funeral convocó a miles de personas. 300 coches formaron parte del cortejo. Está enterrado en Saint John junto con mafiosos estrella como él. La prensa sensacionalista lo llamó el "Don de Teflón" y también el "último Don". La información anuncia que la cadena A&E está produciendo un reality show llamado "Growing Up Gotti" que tiene como protagonista a su hermana, Victoria, una rubia oxigenada tremenda que intenta limpiar su buen nombre haciendo obras benéficas y siendo una gran dama de sociedad. Un despiporre que veré un año después...pero eso todavía no lo sabía.

También que van a llamar a declarar al hermano de Gotti, Junior, que está en la cárcel para que aclare, si quiere, la identidad de estos cadáveres. Apuesto a que no lo hará.
Cuando levanto la cabeza del periódico veo que alguien está haciendo la señal internacional de "Ey tío, eres famoso" desde una mesa contigua. Son dos parejas. Españoles, claro. Las chicas meten la cabeza en el desayuno y noto, perfectamente, como una de ellas le da codazos a su novio. Me hago el sueco. Se que me han confundido con un director de cine muy famoso en nuestro país. Sigo mirando hacia la ventana con gesto de "guau, es increíble que estemos en un octubre tan cálido cuando los del Lonely Planet dicen que en esta época hay que llevar chubasquero a todas partes...". Pero el tipo ya está encima de mi y sigue señalándome.

-"Perdona, eres..."

-"No, no soy Brad Pitt..."
-"No, ya,joder, eres..."

-"No, tampoco soy el director de cine..."

-"No, si ya...al principio pensamos que sí, pero no, tu eres el reportero que hace reportajes en la revista XXXXX..."

A punto estuve de levantarme y gritar "¡Ego, camina conmigo! ¡Siiiiiiiiiiiiiiiii!" pero dije:

-"Si yo soy ese, efectivamente".

-"¿No ves? ¡Es él! ¡Os lo dije! ¡Me debes una hamburguesa! ¡Joder tío, es que eres increíble!".

Y ahí estuve a punto de saltar encima de la mesa y bailar gritando "¡Sigue halagándome! ¡Sigue dándome coba! ¡Mi inseguridad lo demanda!". Y entonces, el fan entrañable dijo:

-"Es que eres un bufón, macho. Un bufón...yo no podría hacer esas gilipolleces, macho, mi novia me mata si hago eso".

-Sí, es lo que tiene ser payaso profesional..." contesto mirándome las puntas de los zapatos viendo como sobre ellos crecen un montón de cascabeles cogidos con enormes borlas de colores.

-"Eh, pero que he dicho bufón de buen rollo, o sea que nos partimos el culo mi colega y yo...o sea que tus payasadas son guays aunque mi novia dice que cómo me puedo reír con cosas así".
-"¿Tu novia es esa de ahí verdad?". Podría haber sustituido novia por "zorra" pero pasé.
-"Sí, mi colega y yo queríamos hacernos una foto contigo...¿Nos dejas?".

-"Sí, claro, claro...".

-"Asi la mandamos a la revista y nos ganamos el premio a la mejor carta del mes...¿Dais una cámara no?

-"Sí,sí, una cámara". Quiero salir de allí, cuanto antes. Dios, soy un bufón.

Su colega se acerca, me da la mano y me dice "Eres un crack, tronco, un despolle, ponte una cara de esas de las tuyas, tío, acuérdate que somos los de Valencia, los colegas de Valencia...por lo de la cámara..."
-"Sí...Valencia...colegas...bufón...esto va a ser mítico". Digo completamente derrotado.
Una de las chicas hace la foto mientras que uno de ellos me dice "¿Y esas caras te salen de normal o las ensayas?".

-"No, no lo necesito, es que soy gilipollas de nacimiento, una especie de retrasado...". La amargura me cae de las comisuras de los labios. Sólo quiero recoger los pedazos de mi autoestima y tirarme al lago. Mejor,quizás me tire a una alcantarilla para que me devoren los cocodrilos albinos que dicen que las pueblan.

Me dan las gracias y vuelven a su mesa. Al rato se levantan y se despiden llamándome Luis que es el nombre de un compañero de redacción con el que comparto apellido pero me vuelven a recordar lo de "acuérdate, somos los de Valencia, los que encontraste en NY"...quiero añadir "me acordaré, como olvidar a tan calurosos fans". Después desaparecen y me dejan allí, hecho un guiñapo. Encima seguro que ganan la cámara.
Me levanto y me pierdo de nuevo por Central Park de camino a la esquina del Waldorf con la Quinta Avenida. Mi cita no se ha presentado, quizás se le haya olvidado. Demasiada cerveza anoche como para recordar nuestra cita, parecía maja. A lo mejor le dije otra hora, no se, mi teléfono funciona fatal porque el roaming es un desastre. Esta noche volveré al CBGB a ver si la encuentro de nuevo.


Esto parece el final de una peli de Chaplin, ya saben, el perdedor solitario y sus ilusiones rotas alejándose mientras la cámara funde a negro rápidamente. Me pregunto como se hubiera tomado Tony Roberts el asunto si lo hubiera llamado "bufón". "Hostia, Roberts, hazte una foto conmigo, tronco que eres un bufón de la hostia...¿Me presentas a Woody Allen?".

El zoo de Central Park todavía está semivacío, Nannys con niños riquísimos se entretienen sentadas en los bancos del Lago de las Tortugas mientras los pequeños Rockefellers y Gettys juegan distraídamente entre ellos. Paso al lado de un grupo de judíos ortodoxos que parecen los extras de El violinista en el Tejado, casi me dan ganas de dar palmas y cantar eso de "If I were a Rich man" mientras ellos dicen eso de "Yavi-dubi-dubi-dubi-dubi-dubi-dubi-Dah" y bailamos.


Pero se lo tomarían fatal, no demuestran mucho humor. Ayer mismo intenté dejar un donativo en una hucha del Museo Judío y uno de los señores me preguntó: "¿Es usted judío?". Le dije que no. Me preguntó amablemente que cuanto dinero había depositado, le dije que cinco dólares y me los devolvió excusándose y diciendo "No aceptamos dinero de gentiles, pero se lo agradecemos de todos modos". ¿Saben? Me dieron ganas de decirle "ya, pero es que mi abuelo mató a muchos de ustedes en la II Guerra Mundial y me gustaría limpiar el honor de la familia...". Hubiera estado mal. Las cosas que uno imagina son más cómicas que las que le ocurren en realidad. De hecho me doy cuenta de que NY es una ciudad completamente irreal o que, por una extraña razón, no consigo acostumbrarme a su visión. Ya ven, me pasa siempre igual, siempre que hago viajes largos me da por pensar que todo lo que veo es un poco falso, que es imposible que haya llegado hasta allí: El Sahara, La torre Eiffel, Florencia, Venecia, Londres...

Tengo alma de secundario. Ya ves, tío...un idiota te dice algo irrelevante en una cafetería y ya te han amargado el día y le estás dando vueltas al asunto queriendo hacer bailar a unos pobres judíos...¡Que obvio!. Decididamente pongo buena cara y llego hasta Times Square en autobús. Allí, en medio del jolgorio, me encuentro con el Naked Cowboy, un chiflado que se ha hecho famoso por ser un chiflado.


Mi alma se serena ante la imagen del simpático loquito. A cambio de unos pocos dólares se deja fotografiar y le hago una minientrevista para una sección de la revista de trabajos que te obligan a disfrazarte. El tipo es tan majo que me canturrea una canción en español barato con frases como "Señorita", "linda" y cosas así. Después de despide diciendo: "Recuerda mi nombre, porque voy a ser una maldita estrella...¡El primer tío que canta Country desnudo...". Sí, claro.
El día pasa tranquilamente, en plan turista. NY es enorme y hay mucho que hacer. La idea es pasar el día visitando cosas. Paseo por Tribeca y veo una galería de arte, luego compruebo que Chinatown se ha comido Little Italy. Allí muchas tiendas mantienen fotos de Gotti que parece que me acompaña por toda la ciudad pero nadie está dispuesto a hablar ni dos minutos sobre él. "Era un gran hombre" dice un viejito en una de las tienda cercanas a Joe´s un establecimiento donde venden armas. La tienda del viejo está llena de fotos de Mussolini y parece el puesto del falangista ese que se ponía en el rastro a vender memorabilia fascista y a predicar la nueva nueva de la Raza Aria. Un amor de persona, sin duda. Luego de vuelta al hostel, a cenar algo en el diner de enfrente y a hablar en español con los dueños que son unos tíos muy majetes, como el dueño de la tienda de al lado, un azerbayano, uzbeko o algo parecido de nombre impronunciable al que todos los españoles del YMCA este donde estamos alojados conocemos como "Apu, el de las birras".



Reventado, sentado en el local, vacío a las 23:00 me tomo una cerveza Coors que es una cerveza lamentable que parece agua. Me estoy jalando una pizza mientras los dueños del sitio me intentan sonsacar cosas sobre la madre patria como la llaman. La hija de uno de ellos, que es la camarera, se ha puesto una camiseta de la selección española para agasajar a todos los spaniards que frecuentamos el local. Entra una pareja, son catalanes, los conozco de vista pero no he cruzado ni una palabra con ellos. Se sientan en la mesa de al lado. Los conozco como "Los saludables" porque tienen aspecto de haber salido de las páginas interiores del Men´s Health. Son monísimos, ambos, y destilan un rollo catalán entrañable. Piden la cena, de pie y se sientan en la mesa de al lado.

-"Hola, bona nit...bueno,buenas noches".

-"hola, ¿Qué tal?"
-"Bien, un poco cansados...¿Llevas días por aquí, verdad?

-"Algunos sí".
-"¿Y sabes sitios para salir? Es que queríamos dar una vuelta..."

-Estuve anoche en el CBGB, pero no se si es vuestro rollo, aquí la gente suele ir a la disco esa que está en una iglesia..."
Ella se cuela en la conversación:
-"¿Y si te vienes a nuestra mesa?
Claro. Me levanto y me siento con ellos arrastrando mi culo gordo, mis gafas de asesino de John Lennon.

-"Es que como los periodistas estáis superinformados pues, te hemos visto y hemos dicho vamos a preguntar al chico este que seguro que sabe..."
-"¿Sois del servicio secreto de los mossos?
Los dos se ríen.

-"No, es que te hemos conocido de la revista XXXXX".

(Otros que quieren ganar una cámara)

-"No diría que leíais XXXXX..."

-"Sí, es que este es como un crío....perdona". Dice ella.

-"Da igual, hoy me han llamado bufón unos de Valencia...".
-"¿En serio? jajajajaa...bueno, es que no están acostumbrados a tratar con famosos...jajajaja..."

-"No, yo soy un secundario".

-"Si quiere podrías venirte con nosotros al sitio ese y así nos lo enseñas..."
-"Vale".


Cenamos y volví al CBGB, el local mítico que cerró poco tiempo después y cuyo interior fue trasladado integramente a Las Vegas donde forma parte de un nuevo CBGB. No volví a ver a mi cita y tampoco a mi ego que debe de andar dando vueltas por Valencia completamente perdido. Por lo pronto estaba en NY, disfrutando de algunos de los mejores días de mi vida, bailando en la capital del mundo con The Stooges atronándome los oídos. Sintiéndome como se deben de sentir los protagonistas de las películas.

3 comentarios:

Blógulo Fruslería dijo...

Redoblado mi ya inmenso entusiasmo en vistas a mi viaje de octubre. Gracias una vez más.

Alex Ferrero dijo...

En serio saludaste a Tony Roberts? A Max? Al que se ponía el traje ignífugo para conducir por L.A. para mantenerse joven? He dejado de leer ahí de la emoción...

Necesitaré algún cómplice sano tuyo para trasladarme el sábado. ¿Cómo lo ves?

Señor Insustancial dijo...

Facitble, non ti preocupare.

Y sí, le di la mano a Tony Roberts...que ilusión me hizo, macho.

Un abrazo